Yautepec, Mor. Agosto 21 de 1914.
Señor General Don Emiliano Zapata.
Presente.
Muy señor mio y de mi respeto
Me permito hacer llegar hasta sus manos la presente
carta, a fin de exponerle, con todo respeto, los hechos que siguen
para que asi norme su conducta y su sentencia respecto a mi persona.
Yo, señor General, fui uno de tantos engañados
por el nefasto Gobierno de Huerta, pues cuándo los americanos
invadieron la República, solicité prestar mis servicios
en defensa de mi Patria, núnca en contra de mis hermanos los
mexicanos.
Cuándo senté plaza, era yo estudiante
de leyes en México, pero en lugar de mandarnos a combatir al
invasor, ya bajo las leyes despóticas militares, se ordenó
que nos incorporaramos a la guarnición de Cuernavaca, a donde
llegué despues de pasado el sitio, el dia 8 de junio próximo
pasado, con la columna que formaba el 9o. Regimiento de Infantería,
para incorporarme al 88o. Regimiento, de manera que no tomé
parte en aquellos combates.
Desde entonces no se nos pagó nuestros
sueldos, se nos vigiló bastante y cuando salimos de la plaza
porque el hambre nos mataba, yo fui uno de los primeros en adherirme
a rendir las armas en Miacatlán y recobrar nuestra libertad
y nuestros derechos.
Para conseguir lo anterior en el citado pueblo
pusimos banderas blancas, cortamos la columna y mandamos parlamentarios.
Cuando se entablaron las negociaciones, yo entregué al señor
Coronel Polilla cuanto les podía ser útil, lo mismo
que al Capitan Popoca, y dichos señores me ofrecieron que se
respetaría nuestra vida y que saldríamos libres.
Me permito suplicar a Ud., señor General,
tome en consideración las razones anteriores y en lo que a
mi respecta, y si a bien lo tiene, se utilizen mis servicios en el
juzgado de esta ciudad, o se me proporcione la manera de llegar a
mi tierra al lado de mi anciana madre, protestando bajo mi palabra
de honor, no volver a tomar las armas ni en favor ni en contra de
ninguna otra causa.
En espera de que se servirá Ud. escuchar
mis suplicas, dado su gran corazón y sus sentimientos humanitarios,
me ofrezco a sus respetables órdenes como su muy alto. y S.
S.
Agustín Oveleyra. [Rúbrica.]
Carcel General de Yautepec, Mor.